Asesiname, pero no me digas esto
envuelve tu lengua manchada
que de pecados se cansa
sálvame de esta verdad marchita
que inconsciente deja mi alma,
oscuros rostros tocan mi cielo
y mi amor es veneno que daña,
alíviame de tu castigo
que la respiración me falta,
déjame volar contigo
e inconscientes hasta el fin
que el pasado es como espinos
y el presente nos delata